El abandono es algo de lo que he
escuchado hablar mucho, lejos de detenerme sobre este tema y hablar de víctimas
y victimarios, hoy he decido ser yo quien abandona.
Abandono todo aquello que me ata en forma negativa, mi tarea en esta vida es encontrar la paz y eso es lo que estoy haciendo.
Abandono todo aquello que me ata en forma negativa, mi tarea en esta vida es encontrar la paz y eso es lo que estoy haciendo.
Hace muchos años comencé a “dar
consejos” a las personas a través de la lectura de las cartas y el tarot, motivado
por mi madre quien en ese entonces me enseño y guio en estos temas.
En ese entonces, aún tenía la
idea equivocada que hacia eso para ayudar a la gente, y qué lejos estaba de
comprender que “la gente” comienza y termina en mí y que en
verdad a quien estaba tratando de ayudar era a mí mismo.
Bueno, esto que te cuento
va a lo siguiente, a veces tenía “clientes” que me contaban que tenían años de
sicoanálisis, y continuaban relatando sus mismas historias o me contaban las
malas experiencias que habían tenido con psicólogos, terapeutas, consejeros,
leedoras de cartas, chamanes, etc. pues consideraban que a finales los habían manipulado
de alguna forma, pero que quede claro que no tengo nada en contra de las
personas que se dedican seria y responsablemente a estas actividades, más por
el contrario les profeso mis respetos y admiración.
En ese entonces yo había comenzado
a practicar algunas terapias de sanación emocional, comencé a leer libros sobre
motivación, desarrollo personal, crecimiento espiritual, etc. leía y practicaba
todo cuanto llegaba a mis manos sobre esos temas, y buscaba siempre aplicar
estos conceptos, estas ideas, estas prácticas con las personas que venían a “consultarme”.
Estas personas venían una o dos
veces conmigo y luego dejaban de venir, y aunque eso nunca me pareció mayor problema
pues respeto y entiendo que cada quien es libre de decidir lo que desea, lo que
no entendía era que regresaban con estos mismos personajes que decían los
manipulaban.
Eso sinceramente me frustraba,
sabia de lo bueno de las terapias de sanación, de la motivación y el
desarrollo personal, yo mismo las practicaba y mi vida había comenzado a mejorar,
no lo comprendía, paso mucho tiempo hasta que me di cuenta de algo muy simple… algunas personas no desean sanarse,
están tan apegadas a sus rollos mentales, que se niegan a abandonar el “pobrecito yo”, “que mala soy”, “que
malo soy”, “me duele”, “me hicieron”. “estoy triste”, “sufro mucho”, “etc.”.
En este momento de mi vida estoy
muy alerta de no “re-crear” las memorias con las que puedo atraer esas mismas
personas y situaciones. Cuando alguien me cuenta sus problemas, reconozco inmediatamente
que no son sus problemas sino “mis memorias” que se activan y se
repiten y que comparto con ellos, entonces limpio, limpio, limpio… y
abandono, no me quedo atado a esa experiencia, yo no tengo el rol de “salvador”,
ni cosa parecida, estoy en constante búsqueda de mi propia paz.
Lo que yo comparto contigo
es auténtico, funciona y si verdaderamente
quieres sanarte ponlo en práctica, yo puedo acompañarte y guiarte en
un comienzo, y pasemos juntos al siguiente nivel, a la siguiente
experiencia, en donde tanto tú como yo superamos las memorias negativas que
habíamos compartido. Deja de buscar en
quien depositar tus escombros mentales una y otra vez aferrándote al papel
de víctima, amorosamente te digo: si sigues repitiendo a uno y otro tu
historia es que no deseas sanarte, abandónala, déjala atrás, comienza a
vivir una nueva historia en donde ¡eres un condenado o condenada a ser
feliz!
Tampoco sigas buscando salvadores,
tu misión como la mía, es encontrar tu propia paz, y te aseguro que cuando
la hayas encontrado, serás como una lámpara encendida alumbrando el camino a
quienes con sinceridad lo están siguiendo, es como ir por una carretera de
noche ayudado por la iluminación de los postes de luz, ellos son silenciosos pero alumbran tu camino.
Hoy comienza una nueva
experiencia en mi vida y quiero abandonar en primer lugar mi papel de salvador, mis
odios, mis resentimientos, mi afán de controlar, mi dependencia
emocional, mis relaciones toxicas, mis apegos, mi tendencia a manipular y
victimizarme y en general todos los bloqueos que me impiden mantener una “limpieza”
constante.
Se dice que “junto con el abandono viene la pérdida”, bueno hoy lo pierdo todo, si
el abandono requiere una pérdida… prefiero
perderlo todo porque sé que después de eso conseguiré mucho más. Hoy estoy
listo para perder, me quedo en blanco, limpio y solo queda PAZ.
“Dios Padre, uno mis tres
conciencias en una sola y te entrego las memorias que mantengo y que me
apartan del camino de la felicidad, del camino de la paz… DEL CAMINO A CASA.
Carlos Zubiate.
PD. Comparto este vídeo donde se explica el método de auto-curación llamado HO'OPONOPONO, y que fue el que dio inicio al cambio en mi vida.